Español English María Inmaculada
Iglesia Católica / Pacoima, CA

De la Apariencia a la Verdad

8vo Domingo del Tiempo Ordinario

“¡Qué bueno es darte gracias, Señor!”Sal. 91

Dice la letra de una canción: Un mundo de apariencia ahoga la confianza, las palabras por huecas manifiestan engaño, la palabra de Dios hemos adulterado para justificar nuestros quehaceres vanos.

En realidad, en este mundo nos es tan fácil engañar a los demás como a nosotros mismos, y fácilmente caemos en eso, creyéndonos que, por cumplir con la confesión y la comunión, ya logró nuestra alma estar en ese nivel, o por cantar alabanzas ya las canta su alma, cuando es muy fácil cantar y rezar de labios y tener el corazón lejos de Dios. Es como si el que está en primer grado se va al salón de octavo y cree que por ello ya avanzó 8 años.

Debemos aprender a revisar bien donde está nuestra alma, pues cuando nos encontremos cara a cara con Dios se pondrá de manifiesto si nuestro corazón lo ama o no, y ya no habrá labios para engañar y dar la respuesta correcta para salir victoriosos con nuestro interés egoísta de llegar al cielo. Ahí se verá claramente si estamos en el nivel de cielo o de purgatorio o de infierno, según este nuestro anhelo de corazón por el amor a Dios y a los demás. Muchos pueden haber estado yendo a misa diario, pero tal vez no crecieron en el amor a Dios y al prójimo, y en esa hora de la verdad quedará de manifiesto el nivel en que están.

Muchos no toman en serio la vida cristiana y espiritual, la viven como un pasatiempo o una afinidad de ideas, pero no han entrado a la vida nueva en Cristo, a la vida en el Espíritu, pues siguen viviendo superficialmente en la carne, tras los valores pasajeros de este mundo, dejando a Dios como algo secundario.

Solo Dios sabe dónde está el corazón de cada ser humano. Nosotros podemos vivir engañados pensando que amamos a Dios y podríamos tenerlo como cero a la izquierda, haciendo con Él lo que queremos. Podemos pensar que amamos a alguien, pero solo lo queremos por sentirnos bien, es decir egoístamente, y solo mientras nos haga sentir bien, porque no sabemos amarlo y buscar su verdadero bien, aunque nos costara sacrificio, lo cual sería el amor verdadero.

PREPARÉMONOS PARA LA CUARESMA. Revisa y descubre: ¿qué lugar das a Dios en tu vida? ¿ Le amas? ¿Buscas agradarle a Él y hacer su voluntad? ¿Le das tiempo? ¿Disfrutas estar con Él, escucharle y aprender de Él? ¿Es el amor de tu vida al que quieres complacer? Solamente así podrás amar verdaderamente a Dios y al prójimo, pues sin este amor primero a Dios, alguien o algo de este mundo ocupa ese lugar de Dios, cayendo así en la idolatría a personas, a mascotas o incluso a cosas, que quitan el lugar de Dios en tu corazón, dejando a Dios relegado a secundario. DALE A DIOS SU LUGAR EN TU CORAZÓN PARA QUE DISFRUTES SU VIDA ABUNDANTE.

Lecturas de la Semana

Domingo: Eclo 27, 4-7/Sal 91, 2-3. 13-14. 15-16 (ver 2)/1 Co 15, 54-58/Lc 6, 39-45
Lunes: Eclo 17, 20-28/Sal 31, 1-2. 5. 6. 7/Mc 10, 17-27
Martes: Eclo 35, 1-15/Sal 49, 5-6. 7-8. 14 Y 23/Mc 10, 28-31
Miércoles: Jl 2, 12-18/Sal 50, 3-4. 5-6. 12-13. 14 y 17/2 Co 5, 20-6, 2/Mt 6, 1-6. 16-18
Jueves: Dt 30, 15-20/Sal 1, 1-2. 3. 4 y 6/Lc 9, 22-25
Viernes: Is 58, 1-9/Sal 50, 3-4. 5-6. 18-19/Mt 9, 14-15
Sábado: Is 58, 9-14/Sal 85, 1-2. 3-4. 5-6/Lc 5, 27-32
Domingo Siguiente: Dt 26, 4-10/Sal 90, 1-2. 10-11. 12-13. 14-15 (ver 5)/Rom 10, 8-13/Lc 4, 1-13

Conmemoraciones de la Semana

Domingo: 8vo Domingo del Tiempo Ordinario
Lunes: Santa Catalina María Drexel, virgen
Martes: San Casimiro
Miércoles: Miércoles de Ceniza
Viernes: Santa Perpetua y Santa Felicitas, mártires
Domingo Siguiente: 1er Domingo de Cuaresma; Inicio del horario de verano

Accessibility Statement