He Venido a Prender Fuego
Domingo de Pentecostés
“Envía, Señor, tu Espíritu, a renovar la Tierra. Aleluya.”Sal. 103
“Yo he venido para prender fuego en la tierra; y cómo quisiera que ya estuviera encendido!”Lucas 12,49
Es lo que anhelaba Jesús, cumplir la profecía de Joel, que el Espíritu llenara la tierra, que todos estuvieran llenos del Amor de Dios que es el Espíritu Santo.
“…porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por medio del Espíritu Santo que nos ha sido dado.”Romanos 5,5
A eso vino Jesús, a llenar la tierra de fe, esperanza y amor, pues por la fe nos abrimos a la esperanza y al amor de Dios y somos capaces de amar. El don del Espíritu es lo más grande que podemos tener, pues con El somos hijos amados de Dios, con vida eterna, que ya no debemos temer la muerte, pues tenemos en nosotros al que es la Vida y dador de Vida. Es por eso que Jesús dijo:
“Es verdad lo que les digo: les conviene que yo me vaya, porque mientras yo no me vaya, el Protector no vendrá a ustedes. Yo me voy, y es para enviárselo.”Juan 16,7
“Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis soportar. Pero cuando El, el Espíritu de verdad, venga, os guiará a toda la verdad.Juan 16,12
“Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, El os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que os he dicho.Juan 14,26
Así es como Jesús nos habla del Espíritu Santo, como el que continuaría su obra entre nosotros, guiando a su Iglesia, como lo hizo desde un principio. Vemos a los primeros apóstoles impulsados por el Espíritu, como relata Hechos de los apóstoles.
Antes de la venida del Espíritu estaban con miedo, encerrados, sin vivir lo que Jesús les había enseñado. Pero con el Espíritu comenzaran a Vivir, a anunciar la buena nueva con valentía, a manifestar que Cristo estaba vivo, con sus palabras y obras, como lo ha venido haciendo la Iglesia por los siglos. Por eso se define al Espíritu como el alma de la Iglesia. El cuerpo sin alma está muerto. El Espíritu es lo que nos da la Vida.
Es con la guía del Espíritu que Cristo promete a su Iglesia que comenzó la labor de la iglesia, de la evangelización, del anuncio y de la caridad. También fue el Espíritu quien les inspiró a poner por escrito la revelación divina que tenemos en el Nuevo testamento. Así como a discernir los errores y herejías que desde un principio quisieron infiltrarse en la Iglesia. En concilios de obispos con el papa pedían la asistencia del Espíritu que les seguía orientando. Es así como también se llegó a compendiar la Sagrada Escritura, la biblia, el credo, etc.
Ven Espíritu Santo enciende en nosotros el fuego de tu amor
Lecturas de la Semana
Domingo: Vigilia: Gn 11, 1-9 o Ex 19, 3-8. 16-20 o Ez 37, 1-14 o Jl 3, 1-5/Sal 103, 1-2. 24. 35. 27-28. 29. 30 (ver 30)/Rom 8, 22-27/Jn 7, 37-39
Vigilia Extensa: Gn 11, 1-9/Ex 19, 3-8. 16-20/Ez 37, 1-14/Jl 3, 1-5/Sal 103, 1-2. 24. 35. 27-28. 29. 30 (ver 30)/Rom 8, 22-27/Jn 7, 37-39
Día: Hch 2, 1-11/Sal 103, 1. 24. 29-30. 31. 34 (ver 30)/1 Co 12, 3-7. 12-13/ Jn 20, 19-23
Lunes: Gn 3, 9-15. 20 o Hch 1, 12-14/Sal 86, 1-2. 3 y 5. 6-7/Jn 19, 25-34
Martes: Eclo 35, 1-12/Sal 49, 5-6. 7-8. 14 y 23/Mc 10, 28-31
Miércoles: Sof 3, 14-18 o Rom 12, 9-16/Is 12, 2-3. 4. 5-6/Lc 1, 39-56
Jueves: Eclo 42, 15-25/Sal 32, 2-3. 4-5. 6-7. 8-9/Mc 10, 46-52
Viernes: Eclo 44, 1. 9-13/Sal 95, 10. 11-12. 13/Mc 11, 11-26
Sábado: Eclo 51, 12-20/Sal 18, 8. 9. 10. 11/Mc 11, 27-33
Domingo Siguiente: Ex 34, 4-6. 8-9/Dn 3, 52. 53. 54. 55. 56 (52)/2 Co 13, 11-13/Jn 3, 16-18
Conmemoraciones de la Semana
Domingo: Domingo de Pentecostés
Lunes: Bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia; Día de los Caídos en Guerra
Martes: Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones
Miércoles: La visitación de la Virgen María
Jueves: San Justino, mártir
Viernes: Santos Marcelino y Pedro, mártires
Sábado: Santos Carlos Lwanga y compañeros, mártires
Domingo Siguiente: La Santísima Trinidad